Casi todo en nuestra sociedad es compra - venta. Cuando queremos seducir vendemos un producto, a nosotros mismos, cuando un partido político se presenta a unas elecciones vende un mensaje, un programa. En una selección de personal para un empleo hemos de vender la mercancía más preciada, a nosotros. Lo malo es que, normalmente, no lo tenemos presente.
Y siempre ha sido así desde el principio de la Humanidad. En este Blog me gustaría compartir experiencias, análisis, pensamientos y desarrollo de teorías.
Al principio de mi vida profesional comercial conocí al Director Comercial en España de Nalco, una multinacional estadounidense que era proveedor nuestro. Máximo Hidalgo, que se convirtió durante muchos años en un maestro a la vez que amigo, que por aquel entonces tenía una dilatada y exitosa carrera profesional me decía siempre que, en el fondo, de lo que se sentía más orgulloso era ser vendedor. Y después de 30 años sigo estando de acuerdo con él.
Esta profesión te obliga a estar en continua formación, a analizar en continuo, a empatizar con el cliente. Siempre he estado en el Sector Industrial, y además comercializando productos, equipos, servicios e instalaciones. Conociendo muchos procesos, buscando soluciones a problemáticas del cliente. He visto sectores que se desmoronaban y otros surgir.
Y seguiré en ello porque es lo que me gusta
